Si sospechamos que podemos tener una Infección de Transmisión Sexual (ITS), el mejor modo de salir de dudas es hacernos pruebas médicas. Puedes dirigirte a tu Centro de Atención Primaria o puedes visitar el Centre Jove d’Atenció a les Sexualitats (CJAS) para informarte.
En caso de tener el diagnóstico de alguna ITS, empieza el tratamiento cuanto antes mejor. Casi todas las ITS pueden curarse sin complicaciones si se tratan correctamente y a tiempo.
Si tienes una ITS, debes hablar con las personas con las que hayas mantenido relaciones sexuales para evitar que se produzca una cadena de contagio. Recuerda que con las ITS no se trata de sentirse culpable ni de buscar culpables. La mayoría de las personas somos vulnerables: las ITS pueden aparecer a cualquier edad y no dependen de condiciones sociales, nivel cultural, sexo, habilidades emocionales, capacidades físicas, situación sexual ni conductas sexuales.